Una confesión y los beneficios de la redención

confesión libreta.png

Cuando abrí este blog, lo hice con la intención de usarlo como una libreta para registrar lo que voy aprendiendo; reflexiones más informales, diferentes a las que compartiría en Aviva Nuestros Corazones o en otros lugares. Pero tengo que confesarles algo, cada vez que quería escribir no me conformaba con compartir algo sencillo. Quería hacer posts estructurados y pulidos; ¿y saben como me quedaba? Como cuando el internet está lento “loading” y al final no publicaba nada.

Toda esta confesión es para decirles que a partir de ahora le daré el uso debido a esta libreta. Cada publicación será una ventanita rústica de mi vida, espero que a través de ella puedas apreciar la gracia de Dios y puedas fijar tus ojos en Cristo. :)

Ok, ¿me acompañas?

Bueno, te cuento que en estas últimas semanas he estado acampando en la carta a los Efesios. Su profundidad me ha obligado a dar pasitos muy lentos para saborear su riqueza. ¡Tan solo en Efesios 1:1-14 hay tanto que desempacar y procesar! Tantas razones para adorar a Dios y para dar gracias por los beneficios que hemos recibido en Cristo. Aquí te las comparto.

Beneficios de la redención

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo:

  • Nos escogió en Él antes de la fundación del mundo. (V.4)

  • Nos hizo santos y sin macha delante de Él. (V.4)

  • Nos predestinó en amor para ser adoptados hijos suyos, mediante Jesucristo, según el afecto de su voluntad, para alabanza de su gracia. (V.5-6a)

  • Nos hizo aceptos en el amado. (V.6)

  • Tenemos redención por su sangre: el perdón de los pecados. (V.7)

  • Hizo sobreabundar sobre nosotros toda sabiduría e inteligencia. (V.8)

  • Nos ha dado a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito. (V.9)

  • Nos ha dado una herencia en Cristo. (V.11)

  • Nos ha sellado con su Espíritu Santo, quien es la garantía de nuestra herencia. (V.13-14)

Estas son solo algunos de los beneficios que se pueden encontrar en este pasaje. Estas son las verdades eternas que pueden sostenernos en los momentos más ordinarios de nuestros días. Son verdades que trascienden lo terrenal y temporal; declaraciones que nos ayudan a fijar nuestra vista en las cosas de arriba.

Sin importar el lugar que me encuentre o la labor que esté desempeñando, si estoy en Cristo, he sido bendecida con TODA bendición en los lugares celestiales. Yo necesito absorber estas verdades, yo necesito recordarlas para escapar de la futilidad de este mundo. Estos beneficios definen quien soy, de quien soy y a donde voy.

Estas verdades me han ayudado como una guía de oración, como una guía de reflexión y como una brújula que me recuerda dónde se encuentra mi norte. Espero que puedas meditar en ellas y que tú también puedas, como decía J. Edwards, estampar eternidad en tus ojos.

¿Hablamos pronto? :)

Anterior
Anterior

Guía de supervivencia para “esos días”

Siguiente
Siguiente

El arte perdido de procesar lento